Esa seguridad era hermosaaún más hermosa que la inseguridad.Ellos pensaban que no se conocíanel uno al otro.Nunca había pasado anda entre ellos.Estas calles, estos corredores¨Dónde pudieron haberse conocido antes?Me gustaría preguntarles si pueden recordarlo.¨Quizás un día en una puerta de vaivén, cara a cara?¨Un "perdón" en la multitud? ¨Un número equivocadoen el teléfono?Pero yo sé la respuesta: no ellos no lo recuerdan.Que tan sorprendidos estaríande que ya, y por un largo tiempo,el destino haya estado jugando con ellos_Aún no listos para cambiar dentro del destinoque los acerca, y al mismo tiempo los alejacortando su camino y reprimiendo una visión,escapándose aún más_Había señales, indicaciones indescifrables,¨qué importa?Hace tres años, tal vez,o quizás el pasado martesesta hoja volando de un hombro a otro.Algo perdido y recolectado_Quién sabe ¨quizás aún una pelota enlos arbustos de la niñez?Hubo manijas, timbres,donde en la huella de una manootra mano era puesta.Maletas de viajeuna al lado de la otraen el equipaje abandonadoy tal vez una noche en un mismo sueñoolvidado al caminar.Pero cada principio es solo una continuacióny el libro del destino está siempre abierto a la mitad.