p>Siempre estaremos influenciados por los colores de nuestros alrededores, pero la extención de dicha influencia dependerá del estado en que se encuentra el chi de cada persona, el cual puede ser bueno o malo. Si tomamos el ejemplo de dos casas identicas, cada una con un feng-shui que va de acorde con esta ciencia – tal vez tiene puertas mal ubicadas, corredores angostos, o colores infortunados – pero cada una de las casas esta ocupada por una pareja diferente, puede entonces que encontremos dificultades de pareja mayores en una, más que en la otra. Esto tal vez es porque el chi de la primera pareja puede que no sea bueno mientras que el de la otra pareja si lo sea. Si el chi de un inquilino es bueno, nada malo pasará justo en esos momentos. Pero en el caso de un chi personal que no esté nada bueno, puede que haya peleas continuas, enfermedades, crisis financieras, y hasta un eventual divorcio. La pareja con el chi bueno también puede ser afectada por el feng-shui que tengan en su hogar, pero esto tomará un período de tiempo más largo. Gradualmente, despues de 5 a 10 años, sus problemas personales empeorarán y cada vez seran más complicados. Así es que la gente que tiene un chi malo sufrirá las consecuencias de un feng-shui desequilibrado de una manera casi inmediata. El Feng-Shui afecta a las personas sin importar si su chi es bueno o es malo, pero el período de tiempo que puede tomar el impacto de un feng-shui negativo será diferente, tomando así mucho más tiempo para aquellos que presentan un feng-shui bueno, que para los que tienen uno indeseable.